jueves, 10 de septiembre de 2015

Segundo día en Jeju, por fin sale el sol

Después de bastantes días grises, una mar movida y un montón de lluvia, por fin el tifón tropical se aleja de Korea y de la isla de Jeju. Sale el sol y decidimos salir a tomarnos nuestro primer día de vacaciones de verdad, vamos a la playa!!!


En Jeju hay bastantes playas, lógico pues es una isla, y se pueden encontrar de varios tipos, desde volcánicas de arena negra, hasta de piedras pasando por las de arena blanca, no es que sea precisamente fina, pero a estas alturas cualquier cosa es de agradecer. El agua por cierto está bastante fría, aunque estemos más o menos a la misma latitud que Alicante, aquí el agua llega bastante más fría y a la vez mucho más clara que en nuestras costas, a pesar de ver bastantes barcos pesqueros en la línea de costera. Para los intrépidos que quieran llegar a esta playa así os diré que se llama 한림 해변 y está cerca del Hallim Park, nuestro próximo destino.


En el Hallim Parkm, cuya entrada cuesta 10.000 wons, se pueden ver bastantes cosas, desde un jardín tropical, un invernadero, una cascada con lago, una serie de cuevas, una zona de aves, una villa folclórica y un jardín de bonsais, la verdad que es un sitio bastante grande donde un buena visita puede llevarte más de medio día, nosotros como teníamos que aprovechar el día soleado estuvimos sólo un par de horas, pero aprovechamos bien la visita puesto que hay una jaula gigante donde puedes entrar y dar de comer a cientos de periquitos que ahí viven.


Después de una comida rápida, ya estábamos de nuevo en la carretera dirección sur de la isla, donde nos esperaba una de las atracciones a la que más bombo y platillo dan en la isla, la inmersión en submarino para ver los bancos de peces y corales. Es una excursión un poco cara, que dura aproximadamente hora y media, te recogen en barco, te llevan a una especie de plataforma acuática donde tienen el submarino y te bajan durante una media hora, la verdad no se ve mucho salvo que es una atracción turística totalmente preparada, donde sólo verás peces cuando se acerque el buzo a darles comida, la verdad me esperaba más.


Una vez en tierra firme, decidimos relajarnos, y en esta isla donde existen más museos, y parques temáticos por metro cuadrado del mundo, decidimos visitar el museo del jardín relajante, traducción literal. Allí aparte de bonsais, carpas gigantes y mucho silencio, no encontrareis nada más, o sí?


Nuestra gran descubrimiento en este remanso de paz, fueron la ZAMBURGUESAS, para quien no lo recuerde, eran ese piedras que podían hundirse o no de humor amarillo, eso sí aquí si caes puedes ser devorado por las mega carpas! Me rio de las del Retiro de Madrid...


Después de un día tan completo, aun nos quedaban ganas de seguir viendo cosas "sorprendentes" de la isla de Jeju, así que atravesamos el centro de la isla, por unos frondosos bosques cubiertos de niebla por efecto de la altura y el volcán, para acabar llegando de noche a la famosa "Mystery road". Ya que no tenemos documento gráfico intentaré explicar lo que aquí encontramos, según la guía era un carretera donde si dejabas el coche en punto muerto éste avanzaba cuesta arriba, la verdad lo probamos y probamos, pero sólo conseguimos que el coche avanzase en punto muerto cuesta abajo, todo un misterio que tendremos que enviar a Iker.

Bromas aparte si que podía parecer que subía cuesta arriba pero era más efecto óptico que otra cosa...

Una vez completamos el día más intenso de los que llevamos en Korea, decidimos volver al barrio para cenar un poco de kinchi y descansar, ya que mañana era nuestro último día en la isla y teníamos que aprovecharlo bien... La aventura continua!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario