sábado, 29 de agosto de 2015

Todo muy rico...

Después de llevar recorridos más de 2.000 kms y más de 10 días en Korea, creo que llega el momento de compartir con vosotros algo muy importante, lo rico que está todo por aquí, empezamos con algunos platos, a ver si encontráis el denominador común


Como veis aquí son muy fieles seguidores de las barbacoas, pero no era ese el denominador común, es otro, el maravilloso Kimchi, que es ese plato que puede parecer como patatas bravas en la imagen, pero en realidad es una hoja como de lechuga o col china, partida en trozos, aunque alguna vez la ponen entera, siempre va embadurnada de una salsa picante, que suele estar compuesta por pimientos rojos picantes y/o ajo, que huele bastante fuerte y sabe aún más. Y siempre, siempre, en cualquier restaurante y/o tugurio que lo parezca te ponen el kimchi como pondrían el pan o la sal en cualquier restaurante español.


Como consejo os diré que no probéis el kimchi solo, es un sabor al que no estamos acostumbrados en la cocina mediterránea, normalmente se suele utilizar para comer junto con otra cosa, pero cuidado que aquí casi todos esos platitos, hasta el rosa de arriba, suelen picar, pero bueno es lo normal en Korea. 

Claro está que siempre existe la posibilidad de probar "otras cosas", y lo que quiero decir es que aquí, se pueden encontrar multitud de puestos callejeros o incluso restaurantes de dudosa calidad, que ofrecen "otras cosas" de la gastronomía koreana, un ejemplo.

Y claro probar cosas nuevas como esa sepia empalada, o el perrito del primer día puede tener consecuencias inesperadas en forma de picor extremo aunque no lo aparente!


Otros días debido a los horarios, o los trayectos tenemos que comer donde podemos, pero al ser este un país tan desarrollado, se puede comer en cualquier supermercado, me explico, tu puedes comprar lo que se ve en la imagen de arriba y te lo "haces" en el mismo supermercado. Como anécdota, os diré que la de la foto de arriba, fue la más falsa de todas, empezando por la coca cola que sabía a sprite y acabando por los melocotones que sabían a pera,    

Al final de nuestras comidas siempre solemos acudir a un plato que no suele fallar en nuestra dieta, ya que el agua no puede calmar el infierno que se desata en las papilas gustativas después de comer cualquier cosa. Maravilloso helado!!!

Las conclusiones de todo esto y en base a la experiencia de estos días, es que el peor sitio y más mugriento y que ni siquiera aparente ser un restaurante, es donde mejor comida y al mejor precio puedes comer, eso sí no sabrás lo que pides, ya que la penetración del inglés en este país diría que es  bastante más escasa que en España. 

Lo mejor sin duda, que puedes comer por menos de 3€ por comida, quedándote bien

Lo malo, que el picante pasa a formar parte de tu cuerpo

EN DEFINITIVA, TODO MUY RICO... 

viernes, 28 de agosto de 2015

Un ferry, un viaje movido y un pez llamado Wando

Después de conocer de primera mano el fantástico tráfico de Busan, decidimos madrugar bastante para poder llegar a la ciudad donde teníamos que coger el ferry que nos llevaría a la isla de Jeju, la buena noticia es que reducíamos considerablemente el tiempo en el ferry, ya que saliendo de Busan, hubiéramos tardado 12 horitas, mientras que con el cambio sólo serían 3, pero realmente compensaba???

Haceros una idea que la velocidad máxima de una autopista de peaje en Korea es de 100 km/h y así como extraordinario, que lo normal, es ir a 80 km/h, diréis que es poco, y que cualquier español le apretaría un poco, pero resulta que aquí hay la mayor concentración de radares conocido por el ser humano, habiendo en algunas recta de un kilometro hasta tres, y no queríamos conocer el sistema penitenciario de este país, así que a respetar los límites, por lo tanto os podéis hacer una idea de lo que se puede tardar en recorrer los 380 km además de los 50 km para salir de Busan... En fin toda una aventura

Una vez llegamos a Wando, a su puerto internacional de ferry, nos dimos cuenta que estábamos en la Korea profunda, ya que si a ese chamizo lo llamaban así, cómo sería el puerto doméstico... Pero lo mejor estaba por llegar, el viaje en ferry.

No he comentado que todo esto fue posible gracias a un contacto local, llamado Jo-han que nos ha ayudado a comprar los billetes del ferry, ya que la única web donde se venden está en coreano y no está disponible en otro idioma, además de que google no la traduce, todo facilidades!

Pero por fin logramos subir al ferry dispuestos a sentarnos cómodamente y relajarnos durante las 3 horas de viaje, ya que estábamos bastante cansados de conducir todo el día. Y aquí tuve otro choque cultural, que aún habiendo dado la vuelta al mundo, me recordó que me quedan muchas cosas por descubrir...


Pues sí! Efectivamente, te obligan a descalzarte y a meterte en una zona de unos 20m x 15m con toda la gente que quepa, y lo único que te dan es un cojín para la cabeza, y cómo siempre el aire acondicionado en modo ártico. Mejor omito lo de los ronquidos y otras costumbres locales antes de que el barco arrancase...

Lo del viaje movido no era por el tramo en coche sino porque al rato de estar en el ferry empezó a moverse cual zodiac por el oleaje, sin saber si esto era normal, y con la dificultad de que nadie habla inglés, decidí salir a cubierta a ver qué pasaba, y me encontré bastante oleaje.

Una vez llegamos a la isla de Jeju, vimos el motivo real de ese oleaje y es que estaba pasando un tifón por la isla, que por suerte estaba debilitado, pero los vientos fuertes y la lluvia fue la bienvenida que nos dio Jeju.

Busan, un pueblecito de pescadores

Después de la visita en Gyeongju, cogimos el coche dirección al sureste de la península coreana, para pasar la noche en la ciudad de Busan, donde en principio íbamos a coger el ferry para la isla de Jeju, pero debido a unos cambios de última hora, tuvimos que coger otro ferry que saldría desde Wando, al otro lado completamente de la península, pero bueno eso es otra historia...

De esta ciudad, que es la segunda del país, sólo os diré que tiene la friolera de 4 millones y si sumamos toda la zona metropolitana, estamos hablando casi de 8... Y si encima no hay rotondas, y los cruces son únicamente regulados con semáforos, haceros una idea de lo que tardamos en pasar este cruce.

También os diré que no es buena idea ir en coche a Busan, o por lo menos no cruzarla entera como hicimos nosotros, ya que desde que empezamos a ver edificios de 25 o 30 plantas, a unos 50 km de lo que marcaba el GPS como el centro, tardamos aproximadamente una hora, y no es por lo atascos, sino por los cruces con semáforo, que son todos... En fin muy divertido.

Por lo demás, decir que Busan o la zona turística de esta ciudad costera, es bastante animada, siendo parecida a nuestra Benidorm, con multitud de hoteles-rascacielos y chiringos de playa, eso sí al estilo asiático, es decir, un puesto donde hay enormes peceras con "seres vivos" y donde tú los eliges y ahí mismo te lo preparan. Y sí digo "seres vivos" porque aparte de pescados y sepias que nadan en círculos, se pueden encontrar langostas, centollos, caracoles, mejillones, lapas, pepinos de mar, y algunas otras cosas que jamás comería y, por su puesto, no sé cómo se llaman.

Como veis mucho LED que esto es un país muy avanzado y ya no hay neones, ambiente por la calle y muchos olores, como cualquier ciudad asiática, que pasas de oler a cerdo frito a gato muerto, en fin esas cosas que tienen por este lado del mundo. No nos dio tiempo a mucho ya que al día siguiente teníamos que cruzarnos el país y aquí lo de las velocidades lo llevan mal, ya os explicaré por qué en otro post. Nos vemos!

miércoles, 26 de agosto de 2015

Gyeongju, ciudad patrimonio de la humanidad

Seguimos con nuestro recorrido por Corea del Sur, y hoy nos ponemos en marcha para visitar la ciudad de Gyeongju, una ciudad de paso obligado para entender un poco más el pasado de esta cultura oriental.


Nuestra primera parada cultural, fueron las tumbas de Daereungwon, que podéis ver en la foto de arriba, son esos montículos cubiertos de césped, en  la antigüedad las autoridades o gente relevante era la única que tenía derecho a este tipo de enterramiento, además eran enterrados, al igual que los egipcios, con todas sus joyas, hay una tumba que se puede visitar y ver como está formada por capas superpuestas de piedras. Dentro de este parque se encuentra la tumba de uno de los reyes de la dinastía Silla, pero no está abierta al público.

Posteriormente decidimos coger el transporte más ridículo y hortera que vimos por la zona, y que curiosamente, a estos asiáticos les encanta, os dejo la foto. 


Aquí se encuentran bastantes monumentos, es la razón de coger esa especie de minibus hormiga-saltamontes, así pudimos recorrer distancias grandes en poco tiempo, pasamos por el Cheomseongdae Observatory, un observador astronómico del siglo VII, luego nos llevaron al Woljeonggyo bridge, vimos una serie de construcciones de la dinastía Silla, el jardín de Wolseong y por último el museo de la ciudad. Donde comentaron que la ciudad, que era la capital del reino de la familia Silla, llegó a tener más de 1 millón de personas durante el siglo X, hasta que los mongoles lo arrasaron.  

Cheomseongdae Observatory
Cuando terminamos la visita cogimos el coche dirección Bulguksa Temple, también en Gyeongju, un templo Budista, de los más importantes del país, y que está enclavado en un lugar inmejorable en la montaña y rodeado de bosque.


Allí como es costumbre en todas nuestras visitas culturales, realizamos una serie de ejercicios, en el templo para pasar desapercibidos entre los visitantes.


En el punto más alto del templo se encontraba el altar más sagrado, que después de subir bastante escalones, os puedo mostrar en esta foto.


Para terminar esta visita de Gyeongju, decidimos ir a ver el Seokguram Grotto, que es un buda que está tallado en piedra dentro de una gruta, lamentablemente no pudimos hacerle una foto porque estaba prohibido y además con férrea vigilancia. La curiosidad de esta efigie de buda, es que está en el punto más alto de la montaña, donde por un lado se ve el mar y por el otro se ve la ciudad, un sitio precioso. Eso sí, id preparados para caminar...

Os he comentado los puntos que vimos en la ciudad de Gyeongju, pero ya os digo que la ciudad es enorme y tiene más de 100 puntos de interés turísticos. Y nosotros como vamos con un planning complicado, decidimos salir a nuestro siguiente destino, pero eso ya para el siguiente post.

감사합니다 = SALUDOS

lunes, 24 de agosto de 2015

El folclore Coreano

안녕하세요

Ahí arriba pone HOLA en un idioma que veis que es muy fácilmente entendible, después de todos estos días que llevamos aquí lo único que hemos aprendido en "gamnsa" que es gracias, y no sabemos escribirlo con sus jeroglíficos.

Hoy hemos estado en visitando unas "villas folclóricas" como las llaman aquí, en realidad son pueblos recreados o semirecreados, donde se puede ver la vida y costumbres que tenían los coreanos en la antigüedad. Empezamos por la villa de la dinastía Joseon, es una de las más cercanas a Seúl.

La verdad que al ser la primera que veíamos podemos decir que nos impresionó, pero con un poco de perspectiva y habiendo visto otras, la ver que esta es posiblemente la que menos historia ofrece y la más preparada para el turista, vamos que de original tiene poco. Eso sí, nos comimos unas tortillas al "korean style" muy ricas.


Después de pasear un rato por la villa, hicimos una serie de ejercicios típicos y folclóricos, así como el saludo asiático clásico.




La verdad que el entorno era de lo más relajante ofreciendo una calma que contrasta fuertemente con el caos y las prisas de la ciudad. Una visita bastante recomendable si sólo vais a visitar Seúl y los alrededores, ya que por un lado te permite conocer un poco el pasado de este pueblo y por otro lado salir de la vorágine de la ciudad.




domingo, 23 de agosto de 2015

Seúl una ciudad grande y con mucha vida

Como ya dije en el anterior post, el segundo día hicimos más cosas, aparte de entrenarnos para un posible ataque del vecino norteño, y además de visitar  el barrio de Itaewon, donde se pueden encontrar cientos de restaurantes de cualquier tipo de comida del mundo, fuimos a la torre de la ciudad, algo así como el Pirulí de Madrid, que mide 237 metros, pero es que además está construida en lo alto de una pequeña montaña que está en el centro de la ciudad, dando desde arriba las mejores vistas de la ciudad, no tuvimos demasiada suerte porque las nubes tapaban el horizonte pero aún así es una visita obligada en la ciudad.

 
Como siempre consejos para los futuros visitantes, en Seul la humedad es del 100%, y el clima en verano puede establecerse entre los 24º y 28ºC, y si a esto le sumas que para llegar a la base de esta torre tienes que subir como 200 escalones dentro de un bosque, aun existiendo un telecabina, que pensamos que se podía haber subido más para evitar esos escalones... El resultado tan fantástico que nos sale es que llegas sudando a la base como si hubieses salido de una sauna.

Una vez arriba, lo dicho unas vistas muy impresionantes, mires donde mires, encuentras edificios, desde ediciones de 5 o 6 plantas hasta rascacielos de más de 40, una pena que el día no acompañase.


Cuando acabamos de ver la ciudad en 360º, tocaba volver, otra vez a recorrer los infinitos escalones y volver a subir al telecabina que nos bajase a la ciudad, por cierto éste sin aire acondicionado, cuando aquí hasta los cajeros del banco para sacar dinero tienen aire acondicionado.

Una vez abajo fuimos a un restaurante que nos había recomendado un amigo coreano, os pongo la foto y luego un par de comentarios.


Chiste local: cómo se parte un pollo asado/frito? Respuesta: como se ve en la foto claramente, con dos tenedores, después de casi 4 días aquí no hemos visto un cuchillo... De la sopa de algas con arroz, mejor no hablo, si queréis le preguntáis a Alberto lo que tuvo que hacer para comérsela.

Después de una parada técnica por el hotel, decidimos probar la noche de Seúl, a ver si es verdad eso que dicen de que aquí tienen más marcha que nosotros. Fuimos a un barrio universitario, llamado Hongdae, donde se puede cenar, tomar algo o ir a una discoteca hasta que se haga de día. Como veis un barrio muy animado y de gente joven.


Lo más curioso que vimos por la zona fueron las discotecas, por lo menos a las dos que fuimos, ya que entramos a "algo" que parecía una discoteca por fuera, y nada más entrar nos sentaron en una mesa, y aunque ponían música para bailar, no había sitio para el baile y los propios coreanos que allí estaban no bailaban... Un poco raro.

Cuando ya volvíamos para el metro, recorrimos un poco más el barrio que parecía no tener fin, ni en longitud, ni en cantidad de gente, y nos encontramos un trocito de España.


La verdad un barrio muy animado, con muchísima variedad tanto en restaurantes como el bares y discotecas, al pasar por Seúl no os olvidéis de salir una tarde noche por aquí, seguro que encontráis algo que os gusta! Mañana empezamos con las visitas culturales

sábado, 22 de agosto de 2015

Segundo día y todos listos que empieza la guerra

Hoy aunque todavía estamos medio tocados por el jet lag, hemos salido para recorrer la ciudad, y una de las visitas turísticas más punteras de aquí, que es visitar la frontera con Corea del Norte, y que teníamos reservada desde hace dos semanas, se ha suspendido y todo porque los vecinos del norte han disparado un par de misiles y a los del sur les ha sentado mal... Ante esto hemos decidido prepararnos y coger un tanque y a la guerraaaa!!!


Para que no haya sustos, no nos han dejado el tanque, ni lo hemos cogido prestado, simplemente hemos ido a visitar el museo de la guerra, donde tienen en una explanada todos los vehículos que participaron en dicha guerra, desde aviones bombarderos, hasta artillería pesada pasando por fragatas.
Aunque lo de la tensión con el Norte si que es verídica, y es la primera vez desde la crisis de 2010 que se habían disparado con cohetes los unos a los otros. Ha sido llegar empezar las hostilidades!

La verdad es que ya que estábamos en el museo, nos hemos dedicado a entrenar por si nos pilla la guerra aquí, ya que sabemos cómo bajar desde un rascacielos, tendremos que aprender a disparar.


Ha dado mucho juego esta visita puesto que aunque hemos dejado de visitar la DMZ (zona desmilitarizada) hemos podido ver y tocar todo lo que se utilizó en la guerra de 1953. Y cómo llevamos despiertos desde las 3 de la mañana, este post se acaba aquí, prometo hacer otro con el resto de cosas que hemos hecho en el día, que no han sido pocas.

jueves, 20 de agosto de 2015

Llegada a Seúl, primeras impresiones, primeros choques culturales

Long way! Como dirían los americanos... Un largo camino el viaje a Seúl, aunque el billete no es caro, cuesta más o menos que un billete a New York en temporada baja, el viaje se me ha hecho un poco largo, pero ya en el avión tuvimos el primer choque culturas, como describirlo sería complicado, os pongo la foto.

Lo más normal del menú el pollo, el resto picaba que daba gusto
Arrancando una nueva aventura asiática, nos encontramos en Seúl la capital de Corea del Sur (la buena). El paso de la aduana ha sido uno de los mejores, porque el funcionario pone el idioma que te corresponde según tu pasaporte a una máquina que habla, te hace unas fotos y te toma las huellas, todo muy rápido y limpio.

Una vez nos enteramos de cómo funciona el transporte a la ciudad, que es un tren express que tarda 45 minutos en llegar a la estación central de Seúl, algo así como nuestra Atocha, y al precio de 8.000 Wons al cambio poco menos de 8 €, nos dirigimos a la ciudad, la verdad el día ha deslucido bastante porque estaba nublado y con lluvia, pero la primero impresión nada más llegar, no es para nada agobiante ni por los edificios ni por la gente, tal vez yo me lo imaginaba más como Hong Kong, Llegamos al hotel y allí tenemos otro choque cultural, que a más de una que yo conozco le haría pedir en recepción el cambio de habitación para no estar en la décima planta en la que se encuentra la habitación.

Traducción " Simplicidad descendente de línea de la vida"
Efectivamente, es algo así como un kit para emergencias, en el que hay un arnés, una cuerda de 30 metros y un mosquetón. Creo que el principal problema de la jugada es sin duda salir por una venta de 20cm x 40cm... Esperemos no tener que usarlo.

Preparamos un poco la ruta y salimos, literalmente a comernos la ciudad, y aunque en España sean poco más de las 3 de la mañana, aquí es la hora de comer, tras un paseo nos entra por los ojos en un puesto callejero una especie de perrito, al estilo oriental.


No diré nada del sabor, sólo diré que no se parece en nada al perrito que teníamos en mente, no dejeis de probarlo si venís por aquí, no ha llegado a 2,5€ cada uno. De esta primera comida callejera y teniendo en cuenta la cena, que también lo ha sido, podemos decir que las impresiones engañan!

Una vez recorridos los primeros kilómetros a pie de esta gran ciudad, vemos el Deoksugung Palace enclavado en una zona de rascacielos y justo delante del ayuntamiento, la entrada es barata 1.000 Wons, al cambio menos de 1€.


Es un complejo grande, pero que se puede visitar caminando, dentro encontrareis el museo de arte moderno y contemporáneo de Korea y poquito más. Si no fuese por el precio popular os diría que es prescindible, pero por un euro nos dudéis en ir y ver un complejo palaciego del siglo XVI.

Seguimos caminando por una especie de arteria principal, y a lo lejos vemos una serie de estatuas y aún más lejos como un nuevo palacio. A pesar de que Seul es una ciudad grande esta zona centro se puede hace a pie sin problemas.

Una vez llegamos al palacio que se veía al fondo, vemos que se trata del Gyeongbokgung Palace, aun más grande que el anterior, vemos que hay colas para comprar las entradas, y que sólo se venden 200 entradas a personas extrajeras, hemos tenido suerte porque logramos entrar, se trata de una visita que sólo abre de 19.30 a 21.30, y la verdad es muy impresionante, en las fotos lo apreciareis.



Como habéis visto el sitio es muy fotogénico y aquí la gente va superpreparada, trípodes, varias cámaras... En fin, para foto divertida la siguiente, y con esto cerramos el primer post de este http://coreanat.blogspot.kr/